El rector de la Universidad Loyola, Fabio Gómez-Estern, y el hermano mayor de la Hermandad de Las Cigarreras, Luis de la Iglesia, han firmado un convenio de colaboración para que estudiantes de los últimos cursos del Grado en Psicología de la institución jesuita realicen prácticas tuteladas en el Centro de Atención Educativa y Psicológica Virgen de la Victoria de la citada hermandad.
De este modo, el alumnado colaborará, junto al equipo del CAES, en la atención de necesidades educativas, emocionales y psicológicas de menores y familias con recursos económicos limitados.
Para el rector de la Universidad Loyola, esta colaboración entronca directamente con la misión de la Universidad, alineadas con las Preferencias Apostólicas Universales de la Compañía de Jesús, de “caminar junto a los jóvenes en la creación de un futuro esperanzador y junto a los más vulnerables”. Asimismo, gracias a esta colaboración, el alumnado podrá “poner al servicio de la sociedad todos los conocimientos adquiridos durante el grado, para dotar a adolescentes y familias de herramientas útiles para afrontar sus vidas y construir un futuro mejor”. Por último, ha deseado que, con la incorporación de nuestros estudiantes, el CAES pueda llegar a un mayor número de personas, “conscientes de que la atención psicológica y educativa es un derecho básico y una necesidad imperiosa en la sociedad actual y, lamentablemente en familias con recursos limitados, el acceso a la atención técnica cualificada se hace muy complejo”.
Por su parte, el hermano mayor de Las Cigarreras sostiene que la Hermandad debe ser fuente de evangelización y ello pasa indudablemente por la mirada al prójimo que más lo necesita. Desde el impulso de su Pastoral, la Hermandad trata de fortalecer los valores teologales de sus hermanos – la fe y la esperanza, que lleven inexorablemente a la caridad. El CAES, que empezó como apoyo educativo a los niños del Hogar de Nazaret –obra social de la Coronación Canónica de Mª Stma. de la Victoria-, ha cogido una gran proyección al detectar una necesidad acuciante, a veces escondida, de muchos adolescentes y sus familias en cuestiones de salud mental y que por motivos económicos no pueden hacer frente a tratamientos de calidad. Con cada vez más casos que atender, la Hermandad y todo su equipo del CAES está muy ilusionado con este acuerdo ya que no solo contribuirá, a través de alumnos muy preparados, a que esos adolescentes vivan de forma íntegra y digna, sino ser también un ejemplo para la propia juventud y trasladar así la importancia de ayudar y colaborar llevando el mensaje de Cristo a una sociedad tan falta de esperanza.
En el acto de firma del convenio también han estado presentes Fernando Carro Molina, consiliario 2º y coordinador de la Pastoral de la Hermandad; Martín Varela Pavón, coordinador del CAES; Esteban Almirón, director del Servicio de Carreras Profesionales de la Universidad, y Carmen Jiménez, responsable de las áreas de Psicología, Educación y Salud de Carreras Profesionales.