La Junta de Andalucía ha convocado el primer proceso selectivo de acceso libre para el ingreso en la especialidad de Arqueología del Cuerpo Superior Facultativo para ejercer las tareas técnicas e inspectoras vinculadas a la tutela del patrimonio cultural de naturaleza arqueológica. Así se contempla en la Resolución de 2 de julio de 2025, de la Dirección General de Recursos Humanos y Función Pública, publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía.
De este modo, el Gobierno andaluz avanza en el cumplimiento del objetivo de agilizar los procedimientos administrativos en este ámbito, contribuyendo así a mejorar las inversiones y promocionar los proyectos económicos mediante la resolución de trámites muy frecuentes, como los informes o autorizaciones emitidos por la Consejería de Cultura y Deporte, que ven reducidos, de esta forma, sus plazos de tramitación.
El plazo de presentación de solicitudes para optar a una de las diez plazas ofertadas de la especialidad de Arqueología está abierto hasta el próximo 21 de julio. Entre los requisitos necesarios figuran estar en posesión de títulos universitarios oficiales de grado en el ámbito del conocimiento en Historia, Arqueología, Geografía, Filosofía y Humanidades, de acuerdo con la normativa vigente, o licenciatura con especialidad en Arqueología.
El proceso selectivo constará de dos ejercicios. El primero tendrá carácter eliminatorio y consistirá en contestar por escrito un cuestionario de carácter teórico-práctico, compuesto de dos partes, que se realizarán en la misma sesión, siendo ambas obligatorias. En el segundo, que también tendrá carácter eliminatorio, los aspirantes deberán desarrollar por escrito, durante un tiempo máximo de 90 minutos, un tema elegido, entre dos extraídos al azar, del programa de materias específico del cuerpo y especialidad.
Este cuerpo de arqueólogos reforzará los mecanismos que velan por la conservación y protección del patrimonio arqueológico cuando existe una intensa actividad económica en los municipios andaluces -localizada, en ocasiones, en sus conjuntos históricos-, que se traduce en la solicitud de informes y autorizaciones de obras que requieren preceptivamente de la realización de una actividad arqueológica, así como por la existencia de un número relevante de conjuntos históricos declarados.