El presidente de la Diputación de Sevilla, Javier Fernández, junto a la diputada de Concertación, Marta Alonso Lappi, ha hecho entrega este martes, 30 de diciembre, de las subvenciones correspondientes a la tercera convocatoria de este año de ayudas del Área de Concertación para apoyar la actividad del tejido asociativo en los distintos territorios de la provincia. En esta última resolución de 2025, se han concedido 867.000 euros para 126 proyectos presentados por 112 entidades, que desarrollan actividades de carácter social y cultural en 47 municipios. Las cuantías otorgadas oscilan entre los 1.000 y los 16.000 euros.
Entre las tres convocatorias de Concertación, la Diputación ha llegado en 2025 a 294 entidades con 326 proyectos, lo que supone un 43,6% más que en 2024 y cerca de 2,6 millones de euros en total. Entre los proyectos, han destacado los de carácter social, que suponen el 63% (como apoyo a personas con discapacidad, la lucha contra las adicciones, la atención a personas con Alzhéimer u otras enfermedades y el trabajo por la integración de personas migrantes, entre otros), mientras que el 37% ha ido a actividades cultuales, en distintas disciplinas.
Durante el acto de entrega de resoluciones, el presidente ha agradecido el trabajo hecho por los empleados públicos del Área de Concertación, que ha permitido estar entregando estas resoluciones un 30 de diciembre: “No hay mejor manera de terminar el año”, ha afirmado. Además, ha vuelto a insistir en el papel crucial que las entidades sociales juegan en la provincia y el papel de aliado y socio estratégico que tienen para la Diputación.
“Yo soy un convencido del tejido asociativo, el eslabón perfecto para conectar una institución como la Diputación de Sevilla y lograr que, desde la cercanía, el conocimiento y la utilidad que tenéis en vuestros respectivos territorios, se genere economía de escala y bienestar para la sociedad”, ha defendido. También ha subrayado que “esta resolución os carga de responsabilidad, porque es dinero público que ponemos en vuestras manos y sabemos que va a ser útil, que lo vais a usar para intentar dinamizar los distintos sectores en los que os movéis”. “Con más de 850.000 euros, la cantidad de personas a las que, a través de vosotros, vamos a ayudar es muy importante”.
TRES RESOLUCIONES EN 2025 Y MÁS FONDOS PARA 2026
La primera resolución del Área de Concertación para el tejido asociativo de la provincia se resolvió en septiembre de 2025, con 1,2 millones de euros concedidos a 112 entidades; la segunda se entregó hace solo quince días, para unos 70 proyectos con un total de 531.690 euros concedidos; hoy se ha concedido la tercera resolución.
Este programa es una firme apuesta de la Diputación por este modelo de colaboración con las entidades sociales y culturales. Las iniciativas subvencionadas abarcan actuaciones tan diversas como la divulgación y conservación del patrimonio, el apoyo a personas con discapacidad o con distintas dolencias, la concienciación en materia de igualdad e inclusión, así como el fomento de la cultura en sus múltiples manifestaciones.
El acto de entrega de las ayudas, celebrado en el Salón de Plenos de la Diputación, ha servido nuevamente como espacio de encuentro e intercambio de experiencias, más allá de la tramitación electrónica de las ayudas, entre las entidades beneficiadas y la institución provincial.
El programa ha recibido en esta edición 500 solicitudes, superando ampliamente a las recibidas en la anterior convocatoria, a la que concurrieron 296 proyectos. Como ha recordado el presidente, estas ayudas del Área de Concertación, se suman a otras específicas, para las entidades que trabajan con personas con discapacidad y para los sectores de la cultura y el deporte que se movilizan desde otras áreas.
Las actividades desarrolladas por el tejido asociativo desempeñan un papel clave en la cohesión social y territorial de la provincia, tanto en grades poblaciones como en las más pequeñas y rurales. A través de su trabajo, las asociaciones generan dinamismo, fortalecen la identidad local y crean redes de apoyo que mejoran la calidad de vida de la ciudadanía, contribuyendo así a fijar población y a hacer de los pueblos espacios más atractivos para vivir y desarrollarse.



