El Ayuntamiento de Sevilla, en colaboración con la Asociación Amigos de la Cerámica Niculoso Pisano, ha inaugurado hoy el rótulo cerámico correspondiente a la “Antigua Calle del Aceite”, dentro del proyecto de recuperación del callejero de Pablo de Olavide de 1771, una iniciativa que continúa avanzando por el centro histórico de la ciudad. Este retablo, el decimotercero recuperado, ha sido posible gracias a la donación del empresario Miguel Gallego, presidente del Grupo MIGASA.
Durante el acto, el delegado de Urbanismo, Juan de la Rosa, ha destacado el valor patrimonial y simbólico de esta actuación: “Desde el gobierno municipal, junto a la Asociación Niculoso Pisano, seguimos recuperando el antiguo callejero de la ciudad. Desde mayo de 2024 ya hemos instalado 14 rótulos con la leyenda ‘Antigua calle de…’, devolviendo así a Sevilla parte de su identidad y su memoria histórica”.
La calle donde se ha ubicado este nuevo retablo, situada junto al Postigo del Aceite, conserva este nombre de manera oficial desde el año 1700. De la Rosa ha recordado brevemente el origen de esta denominación: “En esta zona, donde hoy se alzan los edificios de Correos y el Archivo de Indias, discurría en época romana un ramal del río desde el que se embarcaba el aceite que partía desde la Bética hacia Roma. Siglos después, ya en época moderna, aquí existió también un almacén que abastecía de aceite a la ciudad”.
El delegado ha querido poner en valor la implicación ciudadana y la colaboración público-privada que hace posible esta recuperación del patrimonio histórico:
“No quiero extenderme en la historia de esta calle, pero sí quiero agradecer especialmente a quien ha hecho posible que hoy recuperemos este rótulo. Este azulejo de la ‘Antigua Calle del Aceite’ es una realidad gracias a Miguel Gallego, presidente de MIGASA, cuya vinculación con el sector del aceite de oliva le llevó a ofrecer su colaboración desde el momento en que conoció la iniciativa”.
De la Rosa ha recordado que ya se han instalado las placas cerámicas correspondientes a las antiguas calles La Mar, Bayona, Tienda, Callejón de los Pobres, Sardinas, Tundidores, Cantarranas, La Mosca, Corral del Agua, del Burro, Gradas, Pescado y Aceite, pronto será la de La Cava de los Gitanos y se seguirá avanzando en la restitución del histórico callejero sevillano.
Finalmente, el delegado ha subrayado la importancia de este proyecto para el conjunto de la ciudad: “El nomenclátor urbano no es solo una herramienta para identificar nuestras calles; es también un reflejo de la historia de Sevilla y, en este caso, de la riqueza multicultural que siempre ha caracterizado a nuestra ciudad. Recuperar este azulejo es recuperar parte de nuestra historia”.



