La Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente ha confirmado el hallazgo, captura y marcaje de un ejemplar adulto de lince ibérico (Lynx pardinus) en el término municipal de Cabra, en el área de influencia del Parque Natural de las Sierras Subbéticas, en la provincia de Córdoba. El descubrimiento supone un hito en la recuperación de la especie en el centro de Andalucía y abre un nuevo capítulo en el proceso de expansión natural del felino más amenazado de Europa, que continúa colonizando territorios donde no existían registros de presencia estable en décadas recientes.
El ejemplar, una hembra adulta bautizada como Igabrum, en referencia al antiguo nombre romano de la ciudad de Cabra, había sido detectado de manera puntual en la comarca subbética desde 2024. Su identificación definitiva y el marcaje con un collar radiotransmisor suponen la primera constatación científica de que estos ecosistemas serranos comienzan a integrarse en la red de áreas ocupadas por la especie en Andalucía. Esta novedad adquiere especial relevancia porque las sierras del entorno de Cabra nunca habían contado con un ejemplar radiomarcado, lo que permitirá disponer por primera vez de información detallada sobre movimientos, uso del hábitat y patrones de desplazamiento en una comarca clave para comprender la conectividad entre las poblaciones andaluzas.
La actuación ha sido desarrollada por personal técnico adscrito al Plan de Recuperación del Lince Ibérico, en colaboración con agentes de Medio Ambiente. El dispositivo de captura, basado en un sistema de trampeo selectivo, ha seguido en todo momento los protocolos veterinarios establecidos para garantizar el bienestar del animal. Tras la sedación controlada, el equipo de Amaya procedió a la colocación del collar GPS y a la toma de muestras biológicas necesarias para estudios genéticos y sanitarios. Finalizadas las comprobaciones, Igabrum fue liberada en perfecto estado en el mismo enclave donde había sido detectada, mostrando un comportamiento completamente normal.
El seguimiento mediante radiomarcaje permitirá analizar la conectividad ecológica entre las distintas áreas que conforman la distribución del lince en Andalucía, así como identificar corredores naturales que favorezcan el intercambio entre poblaciones. Esta información es especialmente valiosa en un territorio como el subbético cordobés, situado entre zonas históricas de presencia y otras áreas emergentes donde ya se ha constatado la llegada de ejemplares dispersantes en los últimos años. Gracias a estos datos, será posible evaluar el potencial de nuevos asentamientos y la calidad de los hábitats disponibles, lo que ayudará a orientar futuros trabajos de restauración, conservación y mejora del territorio.
Censo de linces en Andalucía
Este avance se enmarca en un proceso de recuperación sin precedentes. Hace apenas dos décadas, el lince ibérico estuvo al borde de la desaparición, con tan solo 94 ejemplares supervivientes, la mayoría en núcleos aislados de Andalucía. Hoy, según los últimos datos disponibles, la situación es radicalmente distinta. La población peninsular ha alcanzado los 2.401 linces ibéricos, de los cuales 836 se encuentran en Andalucía. Este crecimiento refleja casi el doble de ejemplares que los registrados en 2019 y confirma el papel decisivo de la comunidad autónoma en la preservación de la especie.
La mejora sostenida de las cifras ha sido posible gracias a una larga secuencia de proyectos europeos LIFE y a una red de trabajo que integra a administraciones, científicos, propietarios de fincas, sociedades de cazadores, agricultores y entidades conservacionistas. La colaboración entre todos estos actores ha permitido aplicar conocimientos científicos avanzados, mejorar la gestión del territorio y fortalecer la conexión ecológica entre áreas que antes permanecían aisladas. Los resultados tienen además un valor histórico: todos los linces que hoy viven en España y Portugal descienden de las 75 hembras andaluzas que resistieron cuando la especie se encontraba al borde de la extinción, un dato que ilustra la importancia de Andalucía como núcleo originario de la recuperación.
Actualmente, la comunidad alberga cinco núcleos de reproducción consolidados que garantizan la estabilidad de la metapoblación: Doñana-Aljarafe, Sierra Morena Oriental, Sierras Subbéticas, Campiñas del Guadalquivir y las áreas de conexión. Estos territorios representan una arquitectura ecológica sobre la que se sustenta la expansión natural de la especie, que continúa explorando nuevas sierras, campiñas y corredores naturales, como demuestra ahora el marcaje de Igabrum en Cabra. Cada una de estas áreas aporta características diferenciadas en cuanto a vegetación, disponibilidad de presas y estructura del paisaje, lo que amplía las posibilidades de asentamiento del felino y refuerza su resiliencia frente a futuras amenazas.
Congreso Internacional sobre el Lince ibérico
Este nuevo hallazgo se produce además en un momento especialmente significativo para la conservación del lince ibérico. La próxima semana, del 25 al 27 de noviembre, Sevilla acogerá el Congreso Internacional sobre el Lince Ibérico bajo el lema ‘Visión compartida, acción coordinada: Conservación del lince ibérico en la Península Ibéric’. Este encuentro reunirá a expertos, técnicos, responsables institucionales y representantes de entidades sociales para analizar los logros acumulados durante los últimos años y preparar el camino hacia un nuevo proyecto LIFE que dará continuidad al trabajo ya realizado. Será un espacio para compartir metodologías, revisar resultados, identificar desafíos emergentes y profundizar en la cooperación entre territorios, una de las claves que ha permitido que la especie se sitúe hoy en niveles poblacionales impensables hace apenas dos décadas.
El congreso también pretende consolidar una visión común sobre el futuro del lince ibérico en el contexto europeo, reforzando la idea de que su recuperación es un ejemplo de éxito colectivo. La experiencia acumulada por Andalucía, junto al trabajo desarrollado en Portugal y otras regiones españolas, demuestra que la conservación basada en colaboración multinivel, ciencia aplicada y compromiso social es capaz de revertir situaciones extremas. En este sentido, el encuentro de Sevilla servirá para proyectar hacia Europa una imagen de cooperación efectiva y de apuesta decidida por la biodiversidad, un marco en el que el nuevo hito registrado en Cabra adquiere un valor simbólico adicional.



