El presidente Jesús Aguirre ha inaugurado en el Salón de Pasos Perdidos la muestra ‘Rolando 2:15 – 2:45. 50 años de la primera masacre de ETA’, que ocurrió en Madrid en 1974
Fecha
17/09/2025
El presidente del Parlamento de Andalucía, Jesús Aguirre, ha inaugurado hoy la exposición ‘Rolando 2:15 – 2:45. 50 años de la primera masacre de ETA’, que se podrá visitar durante los próximos días en el Salón de Pasos Perdidos. Llega a la Cámara andaluza a petición de la Fundación contra el Terrorismo y la Violencia Alberto Jiménez-Becerril y ha sido creada por el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo.
La muestra fotográfica revisa el impacto histórico que tuvo el primer atentado múltiple de la banda terrorista ETA, ocurrido en Madrid el viernes 13 de septiembre de 1974. Dejó 13 víctimas mortales, entre ellas la primera víctima andaluza de la banda terrorista, Antonio Lobo Agudo, natural de Villanueva del Río y Minas (Sevilla). Además, hubo 70 personas heridas.
Jesús Aguirre ha pedido a la ciudadanía que “se acerque al Parlamento para conocer la exposición. Porque además de ayudarnos a no olvidar una época que causó tanto daño y tanta sinrazón en España, es importante que nos concienciemos de que siempre hay que trabajar en la defensa de la libertad y de los derechos humanos y contra el terrorismo”.
El presidente de la Cámara ha recordado a todas las víctimas “de la barbarie de ETA, algo de lo que desgraciadamente no fuimos ajenos en Andalucía, como por ejemplo con los asesinatos en Sevilla de Ascen y Alberto, en cuya Memoria se le puso su nombre a una de las Salas principales de esta Cámara andaluza”.
Junto a Aguirre, han asistido a la inauguración varias diputadas y diputados, el director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez; el director de la Fundación contra el Terrorismo y la Violencia Alberto Jiménez-Becerril, Enrique Algar; Teresa Jiménez-Becerril, adjunta primera al Defensor del Pueblo y hermana de Alberto Jiménez-Becerril; y Maribel Lobo, hija de la primera víctima andaluza de ETA.
En palabras de Jiménez-Becerril, iniciativas como esta exposición sirven para dar a conocer las historias de las víctimas invisibles de los “años del plomo” de ETA: “Todos aquí somos partícipes de un acto de memoria, dignidad y justicia”. Además, ha destacado que el carácter “masivo” del atentado en la cafetería Rolando fue la antesala de la “socialización del sufrimiento” que llevó a cabo la banda terrorista y que acabó con las vidas de personas de toda condición, tanto militar como político y civil: “La principal víctima de ETA han sido todos los españoles”.
Seguidamente, Florencio Domínguez, director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, ha destacado que en dicho atentado perdió la vida Antonio Lobo Aguado, primera víctima andaluza de ETA, a quien siguieron 122 andaluces y andaluzas y a los que debemos sumar otros 38 asesinados por otros grupos terroristas.
Por último, en el acto de inauguración de la exposición ha intervenido Maribel Lobo, hija de Antonio Lobo, a quien ha dedicado unas emotivas palabras. Durante su intervención, Lobo ha destacado también cómo influyó en su familia el asesinato de su padre y la falta de ayuda a las víctimas del terrorismo que existía en aquellos años.
La exposición ‘Rolando 2.15 – 2:45. 50 años de la primera masacre de ETA’ es un proyecto itinerante creado por el Centro Memorial, a partir de la exposición matriz ubicada en su espacio museístico de Vitoria, y está estructurada en 22 paneles con códigos QR que aportan más información, haciendo referencia a los diferentes hitos del atentado y contando también las historias de las 13 víctimas mortales. Uno de los paneles hace referencia a los héroes, las personas que dieron lo mejor de sí mismas entre vecinos, empleados de los establecimientos afectados, bomberos, policías, sanitarios, taxistas, etc. Su rápida, efectiva y desinteresada actuación salvó una cantidad incalculable de vidas.
La muestra está comisariada por Gaizka Fernández Soldevilla y Ana Escauriaza Escudero, investigadora, graduada en Historia y Periodismo por la Universidad de Navarra, y doctora en Historia Contemporánea en la Universidad del País Vasco (UPV-EHU), respectivamente.