El presidente de la Diputación ha visitado Cultiply, la empresa de La Rinconada que fusiona dos disciplinas hasta entonces separadas: la ingeniería y la microbiología industrial
El presidente de la Diputación, Javier Fernández, ha visitado hoy la empresa Cultiply, especializada en microbiología industrial y tecnologías de fermentación para procesos biológicos, situada en el término de La Rinconada.
Fernández se ha mostrado gratamente sorprendido “después de ver cómo la ilusión con la que presentaron en su día el proyecto ha hecho que este vaya creciendo desde la innovación y la capacidad de entender que, con mucho esfuerzo, las cosas se pueden conseguir”.
Así, el presidente ha añadido que “hay que fomentar el emprendimiento para que la gente con talento saque proyectos como este hacia adelante”. “He visto gente joven muy preparada y mucho talento sevillano en esta empresa que estoy convencido que se va a convertir, si no lo es ya, en una gran referencia del sector de la biotecnología no solo para Andalucía, sino para España y para toda Europa”, ha enfatizado.
Cultiply es una empresa especializada en biotecnología dedicada a la microbiología industrial y tecnologías de fermentación para la fabricación de productos biológicos. La compañía se centra en ofrecer una plataforma completa de innovación, desde la fase de idea hasta el escalado industrial. La empresa señala que cuenta con instalaciones que “están equipadas con la última tecnología y un equipo de profesionales altamente capacitados y experimentados en el desarrollo de bioprocesos durante más de 30 años”.
Javier Viña, al terminar la carrera de biotecnología en su Sevilla natal “sabía que quería liderar algún proyecto que aportara algo positivo al mundo”. Fue siete años más tarde, en 2020, cuando, junto a su socio y biólogo, Sergio Romero, decidió aventurarse y fundar Cultiply.
“Nuestro equipo está formado por biotecnólogos, biólogos, bioquímicos y profesionales de la biología molecular”, ha señalado Viña. Además, ha mencionado que trabajan en diversas áreas como la alimentación, la agricultura, la biofarmacia y la cosmética. “La empresa, además de ofrecer esos servicios, también hace producciones de estos ingredientes activos y pone a disposición de los clientes las herramientas necesarias para la producción de estos productos ‘in situ’ en sus propias instalaciones”, ha añadido.
Los socios fundadores han subrayado que su objetivo es ayudar a sus clientes a llevar sus ideas al mercado de manera efectiva y rentable y ofrecer soluciones personalizadas utilizando “técnicas avanzadas para el desarrollo y la fabricación de productos biológicos. Esto incluye la optimización de procesos, la caracterización de productos, el control de calidad, la producción y el escalado de bioprocesos”.
Según Viña y Romero, estos años su conocimiento “ha ido creciendo” junto con su cartera de clientes y los procesos que desarrollan, hasta el punto que les ha sido necesario trasladarse a unas instalaciones más grandes y han apostado por quedarse en La Rinconada “generando riqueza y empleo” para el municipio que le abrió las puertas a su proyecto.